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lunes, 17 de febrero de 2014

EN EL NOMBRE LLEVA LA FAMA


Pues qué tal. La semana pasada nos enteramos que en Sonora dieron a conocer una lista de nombres prohibidos por el Estado dizque para evitar que los chamacos sean sujetos de burlas por tal motivo.


Nombres como Aceituno, Marciana y Petronilo (que son los más decentes) están incluidos en dicha lista, que más bien parece la de un concurso de quién tiene más imaginación.

Esto me parece el colmo de la represión por parte del Gobierno, que pretende coartar el sacrosanto derecho de los padres de fregarles la vida a sus hijos con nombrecitos que los marcarán por siempre.

A poco no sería de los más camp el siguiente diálogo:


Mucho gusto, Mazzinger Z González, para servir a usted y le presento a mi amigo Ultraman Godínez.

Encantado de conocerlos. Tetlepanquetzal Popoca para servir a ustedes, respondería el otro, orgullosísimo del autóctono apelativo que le adorna.

Asimismo, nada elegantes son los nombres Caralampio (santo de la devoción de la ex Tigruesa Irma Serrano), Secundino y Epitacio que se encuentran en el santoral y que seguramente estos señores prefirieron el martirio a seguir cargándolos por más tiempo.

No me resistí a dejar de reproducir en su totalidad la lista marras, por lo que ahí les va:

Aceituno (con y sin hueso), All Power, Anivdelarev (un clásico), Aguinaldo, Batman, Benefecia, Burger King (sin cebolla),  Caraciola, Caralampio, Cheyenne, Christmas Day, Cacerolo, Cesárea, Circuncisión (ay), Culebro, Delgadina, Diodoro, Email, Escroto, Espinacia, Facebook, Fulanito, Gordonia, Gorgonio, Harry Potter, Hermione, Hitler, Hurraca (con “H”), Iluminada (muy popular si se legaliza la mota), Indio, James Bond (perfecto para agentes de la policía), Lady Di (para las que se sientes princesas), Marciana, Masiosare (otro clásico), Micheline (para l@s llantud@s), Patrocinio, Panuncio, Petronilo, Piritipio (¿?), Privado, Pocahontas, Procopio, Pomponio (para los nalgones), Rambo (para los que se sienten muy fregones), Robocop (nombre de futuro granadero), Rocky (nombre de futuro bofe), Rolling Stone, Terminator (nombre de futuro guarura), Sonora Querida. Sobeida, Telesforo, Tránsito (nombre de futuro mordelón), Tremebundo, Twitter, Usnavy, Virgen (nadie lo creería),  Verulo, Yahoo y Zoila Rosa, más lo que se acumulen esta semana.

El asunto fue tan sonado que traspasó las fronteras, tanto que el diario británico The Guardian, solicitó una explicación sobre por qué incluían el nombre de Harry Potter en la lista.

Nombres como Guadalupe, José, Juan, María, Pedro, Pablo han quedado totalmente en desuso para ser ocupados por los Christian, Christopher, Brian, Jonathan, Jennifer, Pamela, etc., que la gran mayoría de las veces no tiene nada que ver con los apellidos y la apariencia física de su poseedor (y que conste que no es por discriminar).

Otra de las razones por la que se prohíben los nombres de la lista es (dizque) porque les sería difícil a los chamacos “poder hacer algo en la vida” llamándose así, lo cual es falso de toda falsedad, sino que le pregunten al ex Diputado, ex Senador, ex Secretario de Gobernación y tránsfuga priísta, Diodoro Carrasco Altamirano y al ex Senador Renán Cleominio Zoreda Novelo, a quien hay que admirarle que no se haya suicidado.

Donde más se acostumbran este tipo de nombrecitos es en el sureste del país, región que no se caracteriza por un gran nivel educativo (sólo pregunten a los maestros de Guerrero, Chiapas y Oaxaca), además de que los empleados de los Registros Civiles de estos lugares anotan en las actas de nacimiento barrabasadas como Cristian, Yonatan, Brayan, Yenifer y así por el estilo.

Siempre me había preguntado la razón de que algunos padres les pusieran este tipo de nombres a sus hijos y alguien me hizo notar que éstos abundan en los estratos socio-económicos más bajos, por lo que los padres buscando elevar el nivel social de sus hijos los llaman así.

En una nota aparecida en un diario nacional, entrevistaron a una mujer sonorense llamada Sobeida, quien dijo sentirse orgullosa de su nombre, además de que nunca le ha causado problemas.

La verdad yo dudo esto, pues no creo que por lo menos una vez en su vida algún malandro alburero le haya dicho: “Oiga doña Sobe, hágame un favor”.

Por cierto recuerdo que en cierto edificio de la colonia Fondesa vivían varias familias judías y el portero de dicho edificio registro a su hijo como “Shalom”.

Tengo una amiga que es fanática de la serie “Los años maravillosos” por lo que llamó a sus hijos Kevin y Gwendolyn (sic) que por cierto no les gustan a los chavos, por lo que les dije que agradecieran que a su mamá no le guste la película “Nosotros los pobres”, pues de lo contario serían la Tostada y el Guayabo.

Y sabían también que el padre de Benito Mussolini le puso así porque era admirador del Benemérito.

Otro dato curioso es que el Gobernador de Tabasco en la época de Plutarco Elías Calles, Tomás Garrido Canabal quien se autodenominaba “enemigo personal de Dios” le puso a uno de sus hijos “Lucifer”, nomás por joder a la iglesia católica y el que resultó jodido fue el chamaco. Quién sabe si después se habrá cambiado el nombre.

Volviendo a la lista, supongo que en el Estado de Sonora también estarán prohibidos los nombres que junto con los apellidos formen albures o juegos de palabras, como Aquiles Salto, Débora Melo, Susana Orea, Consuelo Prieto, Alma María Rico, Benito Camelo y otros más que harían las delicias de Bart Simpson para vacilar a Moe.

Para terminar, no vaya a pasar como en la canción Herculano de Chava Flores, que como nada más se albureaban a este pobre, quiso tener en su nombre lo profundo de un sabio del mundo, por lo que se puso Don Profundo, a lo que el villano del juez le contesta: a sus órdenes Don Profundillo, y si puede también me lo presta.


Más nombres.

Algunos actores y actrices se cambiaron sus nombres reales por considerar que con éstos no podrían trascender así, María Félix era María de los Ángeles Félix Güereña, los célebres Hermanos Soler en realidad se apellidaban Díaz Pavia, Delia Magaña se llamaba Gudelia.

Pero el que por absoluta necesidad tuvo que cambiarse el nombre fue el conocido actor Julio Aldama, que apareció en grandes películas como Tlayucan y Tiburoneros, cuyo verdadero nombre era, nada más y nada menos que …

Augurio Aguado Turrubiates (en serio)


Noticia de última hora.

Pues nada, que el Congreso del Estado echó abajo la prohibición del Registro Civil a los padres de ponerles nombres peyorativos a sus vástagos. En su lugar, los "orientarán"  sobre las consecuencias de ésto.

Aleluya, en aras de la libertad y el respeto a los derechos humanos, seguirán proliferando los apelativos estrambóticos que actualmente abundan.