En
2016 la calaca se puso ruda y se ensañó con la comunidad roquera y se cargó a grandes
artistas que ascendieron a otro plano astral
Pero
no a cualquier araña, así que reguetoneros, banderos, salseros, cumbieros y demás
melómanos por el estilo no pierdan su tiempo leyendo esta entrada, además ni
van a entender así que, curiosos absténganse.
Dicho
lo anterior entremos en materia.
Dicen
que mal empieza la semana para el que ahorcan en lunes y enero de 2016 empezó de
la fregada al enterarnos del fallecimiento del Camaleón del Rock, el gran maestro
David Bowie.
Él fue
un visionario y siempre estuvo adelantado por lo menos diez años a su tiempo.
Como
olvidar al legendario Ziggy Stardust que asombró y escandalizo al público de
principios de los años 70s y fue referente del glam rock muy en boga en esa
década.
El
disco que grabó con este personaje es uno de los mejores en la historia del
rock y no tiene desperdicio.
Aquí
les dejo mi canción favorita de este disco, una rola nostálgica y evocadora que
hace recordar tiempos idos que ya nunca volverán.
También
en enero voló Glenn Frey, parte esencial de The Eagles que tuvieron grandes
éxitos de los 70´s a los 2000´s y la rola que más recuerdo es Take it easy,
pues la tocaban en un comercial del whisky Jack Daniels, allá a finales de los
70´s.
La más
conocida rola del grupo es la quemadísima y tocada hasta el cansancio Hotel
California, que a muchos les parece muy tierna, cuando en realidad describe la
experiencia de un adicto a las drogas en un lugar de rehabilitación, un ritual
satánico (según los chairos de la época) o la decadencia del imperio gringo.
Ustedes elijan.
Por
cierto, se dice que se podían escuchar mensajes satánicos si se ponía el vinil
al revés, lo que provocó que muchos tarugos echaran a perder discos y agujas de
las tornamesas.
En
febrero le tocó a Sonny James, cantante que fue poco conocido fuera de los EU,
pero su rola Young love de 1957, es conocida por mucha gente, aunque no sepan
quien la interpreta.
Principalmente
se dedicó a hacer arreglos electrónicos de música clásica y así se hizo
conocido por la raza setentera y, aunque muchos lo tachen de fusilero, lo que
hizo fue darle un nuevo sonido a estas composiciones y así más gente pudo conocerlos
y acercarse a las obras originales.
Pero si de vacas sagradas se trata, pues Dylan es ganado Charolais cara blanca.
Don Leo Tiene rolas padrísimas, pero mis favoritas son Take this waltz y Hallelujah. Esta última muchos la conocieron hasta que la escucharon en el soundtrack de Shreck.
En
marzo se pintó pa´l otro barrio uno de los más grandes tecladistas del rock,
Keith Emerson, debido a una sobredosis de plomo por su propia mano, debido a la
depresión que le causó el sufrir de una enfermedad que le estaba paralizando
una mano y esto, para un tecladista, está poco menos que muy canijo.
Interpretó
rolas verdaderamente espectaculares con ELP, pero en donde se discutió y mostró
su genio fue en la rola America con The Nice, grupo del que formó parte entes
de integrarse a ELP.
Recuerdo haber visto en un documental de la BBC de la época, que un crítico le dijo al Keith que no le gustaba su versión, que era muy chafa y escandalosa.
Por
cierto.
¿Alguien recuerda el nombre de ese crítico?
Seguro
que no, ¿verdad?
Pero a
Keith Emerson siempre lo recordaremos lo fans del Prog Rock.
Sus
interpretaciones fueron legendarias y recuerdo muy bien cuando dijo en una
entrevista de 1970, "si una canción no dura más de media hora, no vale la
pena tocarla en vivo".
¨Así de fregón era.
Él fue
el que descubrió el diamante en bruto que eran los Beatles y siempre los apoyó
a lo largo de su carrera y siguió trabajando con ellos ya separados.
Que
sería de Yesterday y de Eleanor Rigby sin ese cuarteto de cuerdas tan
característico de estas rolas.
Otro al que se lo cargó el cangrejo fue a Billy Paul que con la canción “Me and Mrs. Jones” se volviera inmortal.
Se le
considera un artista de one hit wonder sin embargo tuvo otros éxitos como los
fusiles de Mrs. Robinson (de Simon & Garfunkel) y Let them in (de los
Wings), aunque siempre será recordado por esta rola.
En el
último mes de 2016, el cangrejo se cargó a Greg Lake, segundo tercio de ELP y
bajista y cantante de la banda.
Antes
de llegar a ELP, formó parte de King Crimson ( algo de lo que no cualquiera
puede presumir) y participó en el primer disco de la banda, “In the Court of
the Crimson King”, disco esencial del progre y que trae rolones como la canción
del mismo nombre y Epitaph que después de escucharlas, inmediatamente te
vuelves fan irredento del Rock Progresivo.
Allá a
finales de los 70´s entré a la preparatoria y cuando fui a inscribirme en la H.
Prepa 2, recuerdo que me dieron una Gaceta UNAM en la que venía un anuncio de
Radio UNAM.
Nunca
había escuchado la estación y por la noche me dispuse a hacerlo en mi (en aquel
momento modernísima y ahora retro) grabadora PANASONIC de fayuca y cuando la
sintonice estaban tocando una canción que jamás había escuchado pero que me enganchó
desde los primeros diez segundos.
En la
siguiente media hora no me pude despegar del radio y cuando terminó, me enteré
que acababa de escuchar completo el disco In the Court of the Crimson King.
Al día
siguiente me lancé a buscarlo y solamente lo encontré de importación en la ya
desaparecida Hip 70 y a precio de oro, algo que un chavito de 14 años no podía
pagar, así que me quedé con las ganas.
Años
después por fin pude comprarlo y siempre que lo escucho le encuentro algo nuevo
y es parte del soundtrack de mi vida.
Va la
canción tema del disco en la voz del buen Greg Lake.
También
en diciembre se pintó de colores Scotty Moore, guitarrista de Elvis y que lo
ayudara a que sus canciones de los primeros años tuvieran ese toque tan característico
del Rey, antes de que el ejército lo descafeinara.
Ahí va
Thats all right mama, donde el Scotty se luce con la lira.
Una de
las muertes que si sentí en lo personal fue la de Betsy Pecanins.
La
conocí a finales de los 70´s cuando ya estaba en la prepa y ya ni me acuerdo
cuando la escuche por vez primera, pero en los siguientes treinta y tantos años
fui su fan irredento y cada que podía la iba a ver y por supuesto a escuchar.
Me dio
mucha tristeza ver como se iba deteriorando poco a poco debido a sus problemas
de salud que la estaban dejando sin voz, lo que la obligó a que en sus últimas presentaciones tuviera que compartir el escenario con otros artistas y, cuando
le tocaba actuar, casi declamaba porque ya no podía cantar.
Qué
bueno que ya no fui a su última presentación que fue pocos días antes de su
muerte, pues me cuentan que ya se veía que estaba en las últimas.
Otro
más que se petateó fue Jean Jacques Perrey, que para muchos es un total
desconocido, pero si les digo que su rola “Elephant never forgets” es el tema
del Chavo del Ocho, con esto ya saben quién es.
Él fue
uno de los pioneros del sintetizador y se hizo cuate de Robert Moog, el
inventor de este instrumento y fue de los primeros en hacer música original con
este instrumento.
Por
cierto, quienes todavía soportan ver los viejos programas del Chavo y del
Chapulín Colorado (que tarados éramos de niños) seguramente se han dado cuenta
que el Chésporo nunca le dio crédito al compositor de la música.
Esto
llevó a que cuando JJ se enteró que le andaban picando los ojos demandó al
chaparro y a Telebizca y finalmente llegaron a un arreglo que nunca se dio a
conocer, pero que seguramente les sacó una buena lana al par de transas.
No voy
a poner el tema del Chavo pues ya lo alucino, sino esta otra rola que también
es muy buena y que se llama E.V.A.
Y ya
para acabar, pues estoy a punto de que se me salgan las de San Pedro, quiero
recordar al Muñeco Mayor, al gran Lalo Tex, lira y voz de uno de más grandes
grupos de rock mexicanos, los Tex Tex.
Quien
viera al Lalo tan guarrote, no se imaginaría que en algún momento de su vida
fue maestro de matemáticas, a las que afortunadamente abandonó para dedicarse
al rock.
También
tuve la fortuna de poder verlos en vivo allá en mí ya lejana juventud, en
verdaderos territorios apaches, pues cuando uno es joven piensa que es
indestructible y le vale m´s lo que le pueda ocurrir.
La
Gabriel Hernández, Padierna, Santa Fe (cuando eran tiraderos de basura),
Chimalhuacán y otros sofisticados lugares a los que ahora, ya de viejo, sólo de
verlos en foto, me dan miedo.
Sus
dos primeros discos son imprescindibles y de lo mejor del rock nacional, aunque
después como que se le brincaron las cabras al Lalo y sacó cosas medio jaladas
de los pelos, pero así son los genios y más los roqueros.
Para
que no estén tristes los fans del divo de Juárez, les diré que Juanga no ha
muerto y no solo porque viva en los corazones de sus fans, sino que efectivamente
está vivito y coleando.
Como
el SAT ya lo traía frito por la monserga de no pagar sus impuestos, llegó a un
acuerdo con esta instancia impositiva y previo pago de lo que debía (con las
consabidas multas y recargos), y a cambio de que les traspasara los derechos
por las regalías de su vasta producción musical, le permitieron fingir su muerte y retirarse para vivir tranquilamente sus últimos años y
ahora vive lejos de la fama y la fortuna y del mundanal ruido en una pequeña
isla en medio del Océano Pacifico que no figura en el mapa, donde también se
encuentran alojados Elvis Presley y Jim Morrison y diariamente se arman
tremendas tardes bohemias entre el Rey del Rock, el Rey Lagarto y el Rey del
Kitsch, siendo los dos primeros sus admiradores secretos de siempre.
Este
grupazo no lo tiene ni Trump.
Y lo
que daría por oír gritar a Elvis y a Jim, “arriba Juárez”.
Y por
cierto, algunos patrioteros, llaman a no consumir ningún producto gringo,
debido a las bipolaridades del Trompis.
Pues
yo sólo les digo que no dejaré de escuchar a Aerosmith por Bronco, ni a Bruce
Springsteen por Juanga.